El Consejo Mundial de Energía (WEC) ha reconocido a Colombia como un líder en la transición energética, gracias a sus recursos naturales diversos. Un análisis de la firma BDO en Colombia destaca el papel fundamental de las empresas en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, impulsando la inversión en energías renovables como la solar y la eólica, lo que favorece la sostenibilidad ambiental y la creación de nuevos modelos de negocio rentables a largo plazo.
Fredy Leonardo Castro, socio de Auditoría y Aseguramiento en BDO, subraya la importancia de las decisiones estratégicas y normativas en el avance del país. “Observamos la adopción de decisiones estratégicas y de cumplimiento normativo como primer motor de cambio. Además, los acuerdos de la COP 26 han sido vitales para enfrentar los desafíos del cambio climático”, explica Castro.
El Gobierno Nacional ha establecido ambiciosas metas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 50% para 2030 y en un 100% para 2050, metas que requieren la participación activa de las empresas. En respuesta, muchas compañías colombianas están adoptando alternativas para compensar sus emisiones, consolidando a Colombia como un referente en la transformación energética en América Latina.
Castro destaca que estas decisiones empresariales implican consideraciones financieras significativas, como inversiones en infraestructura y nuevas tecnologías. Aunque los costos iniciales son elevados, los beneficios incluyen una mayor rentabilidad y procesos productivos optimizados. La Asociación de Energías Renovables SER Colombia prevé que el sector podría atraer inversiones de hasta 2.200 millones de dólares en 2024, destinados a 66 proyectos en diversas etapas de desarrollo.
La demanda de proveedores de tecnologías para la generación de energía a partir de fuentes no convencionales, como la solar y la eólica, está en aumento. Además, Colombia está explorando otras fuentes como el hidrógeno verde, una apuesta de empresas como Ecopetrol.
Las inversiones en el país provienen de fuentes tanto públicas como internacionales, como el Banco Interamericano de Desarrollo, que en 2023 destinó 70 millones de dólares para proyectos en Colombia. Muchas organizaciones están adoptando medidas para compensar sus emisiones mediante procesos más limpios y la compra de bonos de carbono.
Empresas como Alpina, Postobón y Essentia están implementando buenas prácticas para reducir sus emisiones utilizando parques solares y paneles en los techos de sus instalaciones. Paralelamente, el Gobierno Nacional está impulsando proyectos de generación de energía renovable, como parques eólicos en la Guajira y solares en el Meta, para equilibrar el uso de fuentes de energía convencionales y no renovables y mitigar los efectos del cambio climático.
Finalmente, BDO en Colombia reconoce el compromiso activo del sector empresarial en impulsar iniciativas hacia una economía más verde, instando a continuar apostando por las energías renovables como una estrategia clave para enfrentar el cambio climático y promover el desarrollo sostenible en el país.