“Alemania se prepara para la Eurocopa 2024 bajo la sombra del terrorismo”

A medida que se acerca la Eurocopa 2024, Alemania se encuentra ante un desafío crucial: la amenaza del terrorismo islamista. Con la expectativa de recibir a más de 13 millones de aficionados de todo el mundo, el país se prepara para organizar uno de los eventos deportivos más grandes del año.

Sin embargo, la sombra del terrorismo oscurece el ambiente, lo que obliga a las autoridades alemanas a desplegar una operación policial sin precedentes para garantizar la seguridad del torneo.

Las recientes amenazas del ‘Voice of Khorasan’, afiliado al Estado Islámico Provincia de Jorasán, han generado una creciente preocupación. Esta entidad, vinculada al atentado de marzo en Moscú, ha dirigido advertencias específicas al torneo, señalando ciudades como Berlín, Dortmund y Múnich, todas sedes cruciales para la Eurocopa.

Los estadios en estas ciudades, con capacidades que alcanzan hasta los 71.000 espectadores, son considerados objetivos prioritarios para posibles ataques terroristas. En respuesta, Alemania ha implementado un dispositivo de seguridad masivo, con 22.000 policías activos en todo el país durante el torneo, además de 300 agentes de los países participantes.

La ministra del Interior de Alemania, Nancy Faeser, ha subrayado la importancia de una preparación integral para hacer frente a cualquier amenaza. La presencia policial será evidente en todas las sedes y áreas de alta concentración de aficionados, con el objetivo de disuadir ataques y garantizar una respuesta rápida en caso de emergencia.

El contexto actual en Alemania, marcado por tensiones globales como la guerra en Ucrania y el conflicto entre Israel y Palestina, ha creado un entorno propicio para la propaganda y los potenciales ataques terroristas. Aunque algunos analistas dudan de la capacidad real del Estado Islámico para llevar a cabo un ataque durante el torneo, advierten sobre la peligrosidad de las estructuras terroristas y su capacidad para actuar rápidamente.

A pesar de los desafíos, Alemania se muestra firme en su preparación para el evento, aunque reconoce la necesidad de permanecer vigilante y adaptable ante las amenazas en constante evolución.