Un homenaje a la tradición musical de Cundinamarca y a los maestros y directores que han formado generaciones.
Villeta fue sede del Quincuagésimo Festival Departamental de Bandas Musicales de Cundinamarca, que durante tres días reunió a más de 1.300 músicos de 20 municipios y 28 bandas musicales. El Parque de La Molienda recibió las presentaciones que exaltaron medio siglo de tradición, talento y disciplina en las categorías Infantil, Juvenil, Mayores, Especial y Tradicional Fiestera.
Durante la clausura se rindió un emotivo homenaje a quienes han sostenido esta tradición durante cinco décadas: los directores y arreglistas musicales. Entre los galardonados se destacaron Jair Ricardo Zamora (Infantil), Andrés Fernando Rozo Gómez (Juvenil), Andrés Prada (Mayores), Fredy Leonardo Garzón Vargas (Especial) y Juan Carlos Vargas (Tradicional Fiestera), reconocidos por su liderazgo artístico y su aporte a la formación de nuevas promesas musicales.
El festival también premió el talento interpretativo de los instrumentistas más sobresalientes: Laura Sofía Pachón de Fómeque (trompeta), Laura Valentina Martínez de Villeta (flauta), Duvan Felipe Cortes de Sopó (saxofón), Andrés David Santiago de Chía (piano) y Christian Jara de Gutiérrez (percusión).
En las competencias principales, las bandas ganadoras sobresalieron con sus presentaciones. En Comparsas se destacaron Tibirita y Villeta; y en las rondas show los primeros lugares fueron para Tibirita (Infantil), Gachetá (Juvenil), Tocancipá (Mayores), Chía (Especial) y San Francisco (Tradicional Fiestera). La Ronda Concurso coronó a las mejores bandas del certamen: Fómeque (Categoría Infantil), Villeta (Categoría Juvenil), Zipaquirá (Categoría Mayores), Cajicá (Categoría Especial) y Choachí (Categoría Tradicional Fiestera).
Estas agrupaciones representarán oficialmente a Cundinamarca en certámenes regionales y nacionales, con el respaldo de la Gobernación de Cundinamarca y el IDECUT. Durante el acto de cierre, la gerente del Instituto, Constanza Solórzano, afirmó que este festival “se consolida como una de las expresiones culturales más importantes del departamento, un espacio donde confluyen la tradición, la disciplina y el amor por la música”.
El cierre artístico estuvo a cargo de la Banda Sinfónica de Cundinamarca y la agrupación Ácido Pantera, quienes fusionaron lo clásico y lo contemporáneo para despedir la versión N° 50 de uno de los festivales bandísticos más importantes del país.