El presidente de Colombia, Gustavo Petro Urrego, ha presentado ante el Consejo de Seguridad de la ONU un ambicioso plan para acelerar la implementación del Acuerdo de Paz firmado en 2016. En su discurso, Petro destacó la urgencia de modificar las leyes mediante un procedimiento de fast track, que permitiría reducir los plazos de tiempo para cumplir efectivamente con los compromisos del acuerdo. Esta medida es crucial, según el mandatario, para avanzar en la reconciliación nacional y en la consolidación de la paz en el país, especialmente en las regiones afectadas por décadas de conflicto armado.
El plan de choque presentado por Petro incluye diversas reformas estructurales. Entre ellas se encuentra la extensión por siete años del plazo de implementación del Acuerdo de Paz, así como modificaciones significativas en la financiación para la inclusión territorial y el desarrollo de zonas PDET (Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial). Petro también hizo énfasis en la necesidad de excarcelar a los campesinos que actualmente están detenidos por cultivos de hoja de coca, proponiendo una nueva estrategia para la sustitución de estos cultivos ilícitos por productos legales como cacao y maíz.
Además, el presidente colombiano abogó por una reforma agraria profunda, que incluye la compra exprés de tierras para los campesinos y la entrega efectiva de las hectáreas prometidas en el Acuerdo de Paz. Petro enfatizó que estas reformas son esenciales para evitar que los compromisos pactados con las FARC y otros grupos armados se dilaten indefinidamente, afectando negativamente a los campesinos y comunidades vulnerables que dependen de estos cambios para su bienestar y estabilidad.
Finalmente, Petro solicitó el respaldo internacional para enfrentar estos desafíos, proponiendo medidas económicas y ambientales que podrían facilitar la implementación del acuerdo, incluyendo la flexibilización del uso de la hoja de coca y el apoyo a una misión internacional complementaria para investigar el neoparamilitarismo y otras formas de violencia en el país. Este llamado busca fortalecer la cooperación global en la construcción de una paz duradera y sostenible en Colombia.