Un nuevo informe de la Defensoría del Pueblo advierte sobre la preocupante lentitud en la implementación del Acuerdo Final de Paz en Colombia. A pesar de algunos avances, persisten serios desafíos, particularmente en la distribución de tierras y la seguridad en zonas rurales. La falta de claridad en las cifras y la disparidad de información están dificultando la adjudicación de tierras, con solo una pequeña fracción de los predios ingresados siendo efectivamente entregados.
El informe también alerta sobre la persistente violencia en el país, con 57 líderes sociales y defensores de derechos humanos asesinados entre enero y abril de 2024, lo que compromete la reforma agraria y la restitución de tierras. Además, la Defensoría subraya la necesidad de mejorar la coordinación entre instituciones y asegurar un uso eficiente de los recursos públicos para promover proyectos productivos sostenibles.
En general, el informe señala que, aunque se han realizado algunos esfuerzos, la implementación del Acuerdo de Paz sigue siendo insuficiente, y hace un llamado urgente a un mayor compromiso por parte del gobierno y las instituciones responsables.