Hizo parte de la historia reciente de Bogotá. En la Secretaría de Gobierno impulsó iniciativas para fortalecer la institucionalidad, promover la participación ciudadana y garantizar el ejercicio democrático.
Hoy, además, se reconoce a la persona: a un hombre joven, padre, hijo, esposo, hermano, colega. Su vida, como la de cualquier ser humano, merece ser valorada y respetada. Y su muerte debe llamarnos a reflexionar como sociedad.
La política no puede seguir siendo un terreno donde la diferencia se convierte en enemistad y debate en agresión. Miguel Uribe defendió sus ideas con pasión, como muchos y muchas lo hacemos desde orillas distintas. Pero ninguna idea, por legítima que sea, puede justificar el odio.
Miguel hizo parte de la historia reciente de Bogotá. En la Secretaría Distrital de Gobierno impulsó iniciativas para fortalecer la institucionalidad, promover la participación ciudadana y garantizar el ejercicio democrático.
Se convoca a todos los sectores a honrar su memoria con un compromiso renovado por el diálogo, el entendimiento y la protección de nuestras instituciones democráticas. Que su legado sirva como puente entre quienes soñamos con una ciudad más justa, más incluyente y profundamente humana.