Durante el lanzamiento de ‘Misión Antioquia’ en Zaragoza, el presidente Gustavo Petro propuso declarar como distritos de utilidad pública las tierras fértiles para entregarlas a campesinos pobres, amparándose en la Constitución y la Ley 160 de 1994. Subrayó la función social de la tierra en la producción de alimentos para el bienestar de la población. Petro denunció obstáculos para la Reforma Agraria, señalando la ocupación ilegal de tierras por descendientes del narcotráfico y la falta de aprobación de la Ley de Jurisdicción Agraria. Propuso reformar la Agencia Nacional de Tierras (ANT) para integrarla con la Agencia de Desarrollo Rural (ADR), facilitando la la compra, entrega y titulación de tierras junto con proyectos productivos.