Este 20 de julio, Naydú Benítez, una cabo segundo de 29 años, desfilará en Bogotá con su Brigada de Desminado Humanitario. Naydú es la única mujer liderando operaciones de desminado en los departamentos de Caquetá y Tolima, y su labor es fundamental para la seguridad de las comunidades rurales afectadas por el conflicto armado en Colombia.
Naydú encuentra gran satisfacción en liberar tierras sospechosas de contener minas antipersonal y recibir las sonrisas de los niños que ahora pueden asistir a la escuela. Su trabajo también incluye la educación sobre el riesgo de minas para la población rural. A pesar de la distancia de su familia, se siente orgullosa de ser una líder femenina en un campo dominado por hombres y anima a otras mujeres a perseguir sus sueños.
El desminado humanitario en Colombia ha sido crucial para reducir las víctimas de minas antipersonal, con un total de 12,460 víctimas registradas hasta mayo de 2024. Aunque el número de víctimas ha disminuido desde la firma del Acuerdo de Paz en 2016, el trabajo continúa con 698 municipios libres de minas y 87 municipios en intervención.
La Brigada de Desminado Humanitario, que ha despejado 275 municipios, sigue trabajando para liberar más áreas y devolver la seguridad y la esperanza a las comunidades rurales. Su labor no solo salva vidas, sino que también permite a las familias retomar sus proyectos de vida y utilizar sus tierras de manera segura y efectiva.